De nuevo, la semana negra sigue en territorio español...

El Real Madrid cayó ayer en la tanda de penaltis, después de 120 minutos angustiosos. Empezó adelantándose por partida doble de las botas de CR7, pero poco después Pepe sentenció a muerte al Madrid provocando un penalti sobre Mario Gómez. El 2-1 no se movió hasta el final, dado que estaban en empate total, a goles y a goles fuera de casa. Cristiano falló el primero, Kaká el segundo, Xabi Alonso marcó, pero Ramos lo mandó a las nubes... Iker paró dos de ellos. El Bayern paró dos y metió tres...
El sueño de la Décima quedará para años posteriores...


El Barça para entonces ya había sido eliminado por el Chelsea el día anterior. Empezó marcando Busquets e Iniesta, pero la única ocasión de peligro del Chelsea la aprovecharon. Con el 2-1 al descanso el Barça estaba eliminado. En la segunda parte, el Chelsea se encerró en su área y contuvieron allí al Barça, hasta que un balón despejado del Chelsea acaba en los pies del Niño Torres, sólo ante Valdés, el cual no puede hacer nada. El partido acaba 2-2.



Lo único que digo para cerrar esta temporada de Champions es que:
"Los grandes equipos se miden por las veces que se levantan"


Publicado por Rasputín

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