Cleopatra, emperatriz egipcia, pasó a la historia por muchas de sus cualidades y aficiones, como, por ejemplo, aquello de bañarse en leche de burra. Pero también paso a la historia por, aunque parezca increíble, por practicar felaciones. Bueno, no está del todo probado y no debería darlo por cierto, pero como, según ha contado Napoleón, hay una ley que me permite decir lo que me de la gana, no tengo por que probarlo...
Pues se ve, que ademas de cascársela a César y a Marco Antonio, también le gustaba dar placer a muchos egipcios con la táctica del chupachups. Se dice que incluso pudo practicarles felaciones a miles de hombres (incluyendo a cien romanos) en un sola noche. Así que es normal que luego los griegos, que son muy salaos (ya saben, si tienen gracia hasta en el yogur con el "Jroña que Jroña"), le pusieran muchos motes. Le decían "la boquiabierta", "la boca de diez mil hombres" y "la de los labios gruesos". ¡Que contento debería tener Cleopatra al pueblo egipcio!
0 comentarios:
Publicar un comentario